Espejo rectangular de pared con marco de metal

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Este exclusivo espejo decorativo destaca por su original composición y su capacidad para transformar cualquier espacio. Está formado por múltiples piezas rectangulares de espejo con esquinas redondeadas, dispuestas de forma independiente sobre un plano posterior. Estas piezas principales parecen unirse mediante pequeños fragmentos rectangulares y cuadrados de espejo situados en un plano más adelantado, generando un efecto visual dinámico, tridimensional y contemporáneo.

Cada uno de los elementos está enmarcado con un elegante marco metálico acabado en tono envejecido, lo que aporta un toque de sofisticación industrial y atemporal. La combinación de planos, formas y texturas convierte este espejo en una pieza decorativa impactante, ideal para colocar en salones, recibidores, pasillos o dormitorios.

Además de cumplir una función estética, este espejo ayuda a ampliar visualmente los espacios y a reflejar la luz natural, aportando luminosidad y sensación de amplitud. Un diseño con carácter propio que añade estilo y personalidad a cualquier ambiente.