Abre la puerta al espíritu navideño: decoración e interiorismo

Con la vuelta de la Navidad a la vuelta de la esquina, pocos son los hogares que aún no han decorado su casa para hacer de éstas, unas fiestas inolvidables. Además si hay un espacio en toda la casa que necesite especial atención es el salón; al fin y al cabo, es donde más tiempo pasaremos con nuestros familiares y amigos. No te limites a poner un poco de espumillón por aquí y por allá. Hay que prepararlo un poco más. Usa toda tu imaginación y creatividad para que en tu casa se respire ese espíritu navideño.

 

Deja volar tu imaginación y utiliza todos los recursos para crear una Navidad mágica.

 

Si antes era tendencia colocar unas lucecitas y unas guirnaldas por aquí y por allá, unas bolas colgadas del árbol y un belén, ahora es tendencia colocar figuras originales, que combinen y creen la atmósfera de una blanca navidad. Pero antes de ponerte a colgar adornos a lo loco tendrás que decidir de qué estilo será tu Navidad.

 

Antes de ponerte a sacar los adornos navideños de todos los años, elige un estilo decorativo para estas fiestas.  

 

Entre las tendencias, la decoración nórdica navideña se encuentra entre las primeras. Su armonía, tranquilidad y belleza son los principios básicos para crear una decoración ligera, discreta en el salón de tu casa. Utiliza el blanco y los tonos grises como base para planificar la decoración, que complementarás con colores naturales: madera, verde o marrón. Utiliza materiales naturales y evita los adornos de plástico. El árbol, mejor natural. Y decóralo con piñas y adornos en tonos claros. Haz uso de ramas secas y piñas para crear bonitos centros coronados con velas blancas y colócalos encoma de los muebles. Serán los complementos ideales para una navidad nórdica.

 

Con un estilo nórdico, elige materiales naturales y tonos claros. 

 

Otra opción que tienes es trasladar el Polo Norte a tu salón. Es la conocida como decoración de Navidad ártica. En este caso, la clave está en la referencia a los osos polares, los iglús y mucha nieve. Utiliza un árbol de Navidad de efecto nevado y decóralo con adornos en tonos blancos, beiges y azules. Añade unas bolas blancas que simulen copos de nieve. Puedes colocar también algún detalle en plata.

 

Utiliza tonos blancos, plateados y azules para un ambiente propio del Ártico. 

 

La más tradicional, sin duda, es la decoración tradicional navideña, en la que predominan los colores verde, rojo y blanco. Los Papá Noel o Santa Claus hacen su aparición creando un espacio cálido y acogedor. Coloca un abeto bien frondoso y añádele algunas de las figuritas navideñas por excelencia: unos renos, muñecos de nieve, santas, calcetines colgados de la chimenea, farolillos o angelitos. Una tendencia esta Navidad es añadir casitas de pájaro de madera. También puedes colgar unas divertidas tarjetitas con los deseos navideños de tu familia y amigos. Quedará ideal.

 

En un ambiente más tradicional, predominarán los tonos rojos, blancos y verdes. 

 

Otra de las más típicas es la decoración navideña rústica. En este caso, los colores otoñales tienen mayor presencia. Los naranjas, verdes y marrones inundarán la estancia y encontrarán su lugar junto a otros elementos naturales como piñas, cajas de madera o elementos de mimbre. Colocadas en la parte inferior del árbol le darás un toque muy campestre. No utilices tampoco adornos de plástico, sino que todos deben ser naturales, lo que, además, le dará un aroma muy verde a tu hogar.  

 

Madera, mimbre y elementos naturales son los protagonistas en una Navidad rústica.  

 

Otra de las favoritas entre las tendencias navideñas es la decoración romántica y provenzal en tonos blancos. Utiliza el color blanco en detalles decorativos como en textiles, piñas, ramas de abeto, etc. y deja que el árbol sea el centro focal de la estancia, adornado con velas, tul y las clásicas bolas y estrellas. Añade unos toques dorados y lograrás una atmósfera muy romántica. Puedes introducir en la decoración centros creados con rosas y ramas con detalles en plata.    

 

Para una decoración romántica, utiliza tonos blancos y elementos tradicionales.  

 

Finalmente, la decoración de fantasía es ideal si tienes niños pequeños en casa. Colgando del árbol predominan las casitas de caramelo, las bolas de colores, las cajas de regalo con divertidos estampados y las galletas navideñas. La clave está en añadir colores vivos y brillantes a raudales.

 

 

Y no te limites sólo al interior, puedes, incluso, decorar el exterior de tu casa haciendo un jardín navideño. Como ves, las opciones para hacer de tu Navidad unas fechas inigualables son ilimitadas. Deja volar tu imaginación, saca tu lado más soñador y travieso y haz de tu salón un espacio muy acogedor y que desprenda ese espíritu navideño.