Cómo decorar una habitación de matrimonio grande

El espacio en el que duermes y descansas ha de ser un remanso de paz y tranquilidad. Apunta varios consejos para dormitorios grandes

01/12/2017 02:15

Tu dormitorio ha de presumir de ser un espacio de relax y descanso. Un oasis para desconectar al final de una larga jornada y en el que no hay cabida para los problemas con los que nos ataca el día a día. Tu habitación de matrimonio es el espacio en el que dejarse llevar, desmelenarse y sentirse 100% cómoda. Por eso, cuando nos enfrentamos a la decoración de una habitación de matrimonio de grandes dimensiones podemos pecar tanto en el exceso como en la ausencia de mobiliario.

Tu habitación ha de ser un espacio reservado al relax y el descanso.

En la imagen: Dormitorio art deco Valona.

La cama, el color de las paredes y los textiles, la iluminación, las texturas del mobiliario… Todo influye para crear la atmósfera idónea para descansar y tener unos dulces sueños. Lo primero en lo que tienes que pensar es en la distribución del cuarto. Aunque tengas la intrínseca necesidad de llenar los espacios vacíos, no te dejes llevar. Es preferible elegir muebles más grandes, que se ajusten al espacio del que dispones. Así conseguirás que la habitación quede perfecta sin complementos de más.

No te dejes llevar por el "horror vacui", no llenes la habitación de muebles.

En la imagen: Dormitorio Vintage Airone.

En un dormitorio, la cama es el elemento con más peso, por eso su elección es muy importante. Antes de decantarte por el tamaño de la cama, mide bien la pared en la que quieres colocarla. Coloca una mesilla de, al menos, 40 cm, a cada lado. Te servirá para colocar tu libro de mesilla, el despertador, el móvil, un vaso de agua o unas lámparas. Además ayudará a dar sensación de simetría y armonía en el espacio.

Coloca dos mesillas, una a cada lado de la cama, para aumentar la sensación de armonía.

En la imagen: Dormitorio moderno James.

También puedes colocar un cabecero corrido. Ayudará a mantener la sensación de amplitud en el dormitorio incluso aunque tengas varios espacios diferenciados. Suelen ser bajos y ocupar gran parte del ancho de la pared. Es cierto que este tipo de cabecero da mayor sensación de amplitud, y ya tienes un dormitorio grande, por lo que es ideal si has creado diferentes ambientes en tu dormitorio.

Con un cabecero corrido te sentirás arropado en una atmósfera muy cálida.

En la imagen: Dormitorio Moderno Capri.

A la hora de seleccionar el color de las paredes, siempre debes tener en cuenta que el principal objetivo de esta habitación es el descanso y la tranquilidad. Elige tonos claros, suaves y cálidos. Son perfectos el beige, crema, salmón, amarillo pajizo, así como los turquesas, verdes agua o grises cálidos. Si quieres diferenciar alguna zona del dormitorio, para un rincón con un escritorio, por ejemplo, puedes utilizar algún tono más oscuro en una de las paredes. Este tipo de tonalidades hacen que el espacio empequeñezca, por lo que son perfectas para utilizar en habitaciones de matrimonio grandes.

Puedes diferenciar una pared pintándola de un color más llamativo.

En la imagen: Dormitorio retro Morgan II.

El suelo, mejor de madera. Al ser una habitación grande, el suelo de madera maciza o laminada aportará calidez al cuarto y, al contacto con nuestros pies, la sensación será similar. Y si lo cubres con alguna alfombra de pelo largo, no querrás volver a entrar calzada en la habitación y contribuirá a crear una atmósfera muy acogedora.

Con un suelo laminado o de madera maciza y una alfombra no volverás a andar con zapatillas en tu habitación.

En la imagen: Dormitorio nórdico Osaka.

Un dormitorio grande te puede brindar cientos de posibilidades. Una magnífica opción es la creación de diferentes espacios. Un rincón de lectura, una zona de estar con televisión, un vestidor, un tocador (por supuesto)... Tienes espacio para todo.

Crea espacios diferenciados en tu habitación: una zona de lectura, una de estar, un vestidor...

En la imagen: Dormitorio moderno Volga nature.

Para crear una zona de vestidor, si el dormitorio es inmensamente grande, puedes situar la cama en medio de la habitación. Después pon un armario en la zona del cabecero, la parte trasera servirá como pared y nos dará la sensación de estar arropados. Al otro lado, tendrás la zona de vestidor. La iluminación te ayudará a delimitar la zona, que puedes completar con una cómoda butaca y un espejo de cuerpo entero. Otra opción es un armario a medida de pared a pared y, si tienes espacio, contempla la posibilidad de situarlo detrás de un tabique para mayor intimidad o incluso integrarlo en el baño.

Prueba a colocar la cama en el centro de la estancia. El resultado será sorprendente.

En la imagen: Dormitorio moderno Samani.

Con un dormitorio grande, no puedes dejar de planificar una zona para tu tocador que, además, le conferirá a la estancia un toque romántico y femenino. Esta clásica pieza vuelve a estar de moda y se ha convertido en un complemento obligado. Un tocador te ayudará a tener en orden tus cremas, perfumes y cosméticos. Ubícalo en una zona luminosa, añade un espejo, un ligero y buena iluminación. Arreglarte cada día no volverá a ser lo mismo.

Coloca un tocador en tu dormitorio: arreglarse nunca volverá a ser lo mismo.

En la imagen: Dormitorio vintage Avignon II.

No puedes descuidar la elección de los textiles que vestirán tu dormitorio. Son los verdaderos protagonistas del confort. Utiliza tonos blancos para la ropa de cama, aportará sensación de luminosidad y limpieza. Utiliza cojines sobre la cama, juega con las diferentes texturas y tamaños, y puedes utilizar papel pintado para dotar al dormitorio de un aire acogedor.